Hola, ¿alguna vez has sentido que te volvías completamente loco después de una discusión? Vaya, no puedo contar el número de veces que me ha pasado. Estás manteniendo una conversación con alguien. Esa persona intenta absolutamente convencerte de que has dicho algo que no has dicho. Su actitud intenta convencerte de que estás equivocado cuando no es así. Se siente tan cómoda mintiendo que acaba molestándote aún más. Te hace sentir que te toman por tonto… ¡Grrrrr! ¡Me molesta sólo de hablar de ello! Este proceso no es exclusivo de la manipulación, pero se da muy a menudo en lo que se conoce como manipulación emocional. Las emociones son terreno abonado para la manipulación por la inestabilidad que pueden provocar. Existe una gran confusión en este ámbito. Así que hoy vamos a ver qué es la manipulación y cómo se manifiesta en el ámbito de las emociones. Luego te daré algunos consejos para ayudarte a desarrollar tu estabilidad emocional y liberarte de este tipo de manipulación. La manipulación consiste en construir una imagen de la realidad que parece ser la verdadera. Crea una relación de poder que conduce al control psicológico de una persona. La imagen proyectada está siempre muy cerca de la realidad, para confundirte, hacerte cuestionar las cosas y luego atraparte en una situación que se agrava rápidamente. Aplicado a las emociones, consiste en hacerte creer que sientes algo, que has dicho algo o que estás pensando algo que te provoca emociones, llevándote a un estado más frágil. Está claro que, para los manipuladores emocionales, las emociones son un auténtico patio de recreo; ¡juegan con las emociones! ¿Por qué dices eso? Un manipulador siempre está tratando conscientemente de obtener algo y lo dará todo hasta conseguirlo. Serán muy perceptivos al respecto. Sin embargo, a menudo destacarán ciertas cosas en su comportamiento: – No cumplen su palabra: a menudo hacen promesas para conseguir lo que quieren, pero no están dispuestos a hacerlo realmente. Los manipuladores buscan obtener sin dar. – Mentir es una forma de vida para ellos: la mentira fomenta la confusión, el manipulador suele desarrollar el hábito de mentir y miente incluso sobre temas sin importancia. – Victimizan a los demás: una víctima siempre atrae la atención y la compasión de los demás. Victimizarán para ablandar a su presa y conseguir que deponga las armas. – Siempre sufren más que los demás: por mucho que sufran, los manipuladores emocionales siempre han experimentado cosas peores, más y más atroces. – Son profesionales en hacer que la gente se sienta culpable. Por lo general, los manipuladores no están dispuestos a aceptar y asumir la responsabilidad de sus actos, y siempre se las arreglarán para echarte a ti la culpa de sus transgresiones. Nunca es culpa suya y siempre intentarán que te disculpes por algo que no has hecho.

– Se desahogan con un chivo expiatorio: estas personas suelen estar enfermas ellas mismas y no quieren asumir nada, como si fuera demasiado para ellas o demasiado vergonzoso. Así que lo descargan todo en su víctima (chivo expiatorio). De este modo, la responsabilidad de sus actos pasa de ellos mismos a otra persona. La manipulación emocional es muy peligrosa y tiene importantes consecuencias para la vida de sus víctimas. Pero no hay por qué convertirla en una psicosis. Hay formas muy sencillas de afrontarla y evitarla. Aunque este tipo de comportamiento sea difícil de detectar, recuerda siempre esta llamativa ilustración de los agentes del departamento de finanzas que luchan contra los falsificadores. ¡Se concentran en el billete auténtico! ¿Por qué lo hacen? Los falsificadores utilizan constantemente nuevos métodos y nuevos elementos para acercarse al auténtico y engañar a los agentes y a la tecnología de control. Al concentrarse en el billete real y conocerlo al dedillo, son capaces de detectar los elementos falsos muy rápidamente. Para evitar la manipulación emocional, he aquí algunas claves: 1. Identidad: tu valor e identidad dependen de lo que eres, no de lo que haces. Ser y hacer son dos cosas distintas. Si sabes quién eres, sabes cuál es tu valor y nadie puede hacerte creer lo contrario.
Puede que lo intenten, pero no lo conseguirán. 2. Intención. Intención: tu motivación siempre ayudará a reforzar tu estabilidad emocional. La fuerza de voluntad y la intención son las dos palancas más importantes en la consecución de un objetivo y en nuestro progreso. Asegurarte de que tomas decisiones y actúas por las motivaciones correctas y por el bien de los demás nos ayuda a afrontar este tipo de comportamiento. Nadie puede saber mejor que tú las razones por las que actúas, fija tu mirada en esto y exprésalo, puede que la gente no crea tus motivaciones, pero no pueden cambiarlas. No puedes hacer que te crean, pero puedes, con paciencia y perseverancia, demostrar que los frutos de tus actos son buenos.
Puedes distinguir un árbol por sus frutos! 3. Infraestructura: los cimientos de tu vida también te ayudarán a desbaratar este tipo de comportamiento. La Biblia nos dice en Mateo 7.24: “El que oye lo que yo os digo y lo pone en práctica es como un hombre prudente que construyó su casa sobre roca. Cayó la lluvia, se precipitaron los torrentes, sopló la tempestad y azotó aquella casa; la casa no se derrumbó, porque estaba edificada sobre roca”. Si te mantienes sobre una base sólida, sobre la verdad, nada podrá derribarte, ¡porque tus cimientos son inquebrantables! He aquí 3 claves que te ayudarán a reforzar tu estabilidad emocional y a evitar las trampas de la manipulación emocional. Una vez más, te insto a que hagas una cosa: conócete a ti mismo en lugar de escuchar lo que los demás dicen de ti. Para ello, sólo puedo invitarte a acercarte a alguien que sintió que tu valor era tan grande, tan importante, que dio a su Hijo por ti: Dios.

Te invito a escuchar el programa de radio que grabé la semana pasada, que te mostrará lo mucho que Dios nos ama y nunca nos abandona. Te enviaré el enlace en cuanto se emita. En nuestro próximo boletín continuaremos nuestra serie analizando juntos cómo cultivar emociones sanas. Para asegurarte de que no te lo pierdes, asegúrate de suscribirte haciendo clic en “Me suscribo” al final de este artículo. También puedes seguirnos y compartir este artículo en nuestras redes sociales: Facebook, Twitter, Instagram y LinkedIn, para estar al día de nuestras novedades.

Hasta pronto, ¡eres maravillosa! Joachim Fontaine Coach | Consultor | Formador

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