Hola, Como vimos hace dos meses, toda emoción es información. Puede abrumarte e impedirte avanzar haciendo que sólo pienses en ella, o puede empujarte a actuar en una dirección determinada. También vimos que una buena gestión de las emociones te permite ajustar tus velas en la dirección correcta. El viento puede soplar, pero depende de nosotros decidir si queremos dejar que nos lleve o utilizarlo para movernos en la dirección que queremos ir. Hay distintos tipos de emoción, y su interpretación difiere. Distinguimos dos tipos de emoción: las emociones primarias y las emociones reflejas. Las emociones primarias son reacciones a un acontecimiento externo que desencadena una emoción en ti. Las emociones reflejas son emociones desencadenadas por otras emociones. Una emoción que sientes te lleva a otra. Este nivel de profundidad emocional es más fuerte e influyente que las emociones primarias. Una buena salud emocional implica saber gestionar las emociones primarias y su interpretación: anular los razonamientos y las alturas que se elevan y llevar los pensamientos cautivos a una concepción más sana. También implica cultivar las emociones reflejas haciendo objeto de nuestros pensamientos todo lo que es verdadero, todo lo que es honorable, todo lo que es justo, todo lo que es puro, todo lo que es amable, todo lo que merece aprobación, todo lo que es virtuoso y digno de alabanza, lo que repercutirá positivamente en las emociones primarias. Cuando surge una situación, se pone en marcha una asociación cognitiva (de pensamientos), que establece el vínculo entre el acontecimiento presente y otros acontecimientos de nuestra experiencia pasada, situaciones de las que hemos sido conscientes, etcétera. Nuestro cuerpo responde entonces en función de las distintas informaciones recibidas. Podríamos pensar que las emociones primarias son la fuente del comportamiento manifestado, pero si lo analizamos detenidamente, no es así. La emoción primaria envía información al cerebro, que la analizará y añadirá otras imágenes, situaciones, etc. que darán lugar a emociones reflejas y desencadenarán comportamientos saludables o tóxicos. Para mantener una buena salud y una buena gestión emocional, necesitamos alimentar nuestro acervo cognitivo con situaciones, historias, imágenes, sonidos, sabores y sensaciones asociados a cosas positivas. Esto tendrá un efecto y un impacto positivos en nuestras emociones reflejas y en nuestras emociones primarias, liberando la transformación emocional. Para ayudarte a llenar tus pensamientos de forma saludable, consulta nuestro artículo anterior: “Llena tu depósito” haciendo clic aquí: https://mailchi.mp/481b5fc29e78/faites-le-plein En nuestro próximo Boletín de Noticias veremos cómo nuestras emociones pueden ser un verdadero recurso. Para asegurarte de que no te lo pierdes, asegúrate de suscribirte haciendo clic en “Me suscribo” al final de este artículo. También puedes seguirnos y compartir este artículo en nuestras redes sociales: Facebook, Twitter, Instagram y LinkedIn, para estar al día de nuestras últimas noticias.

Hasta pronto, ¡Eres maravilloso! Joachim Fontaine Coach | Consultor | Formador

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